Dentro de las actividades que realizan los grupos de guías y scouts de Europa, especialmente en la última etapa de formación (16 a 18 años), hay un marcado componente de servicio. Con este pretexto, el domingo 16 de junio de 2024, seis jóvenes scouts de Alcalá de Henares visitaron la Fundación Astier (Patronato de San José).
Víctor Hervías, responsable del grupo scout Justo y Pastor, perteneciente a la asociación de guías y scouts de Europa, afirma que este es «un periodo especial para nuestros jóvenes, dos años en los que la asociación les quiere acompañar en su discernimiento, tanto vocacional como de servicio. Terminada esta etapa se espera de nuestros ‘rovers’ y ‘guías mayores’ que se entreguen al servicio de la Iglesia y de la sociedad donde el Señor, con la ayuda de su director espiritual y de su padrino -adulto ya comprometido al servicio que acompaña al joven-, les haya indicado».
Estos jóvenes scouts pudieron pasar unas horas con las mujeres que la Fundación Asier acompaña cada día en el Patronato San José, ubicado en la avenida de Meco, en la ciudad complutense. Según explica uno de los scouts, este lugar «es un centro residencial donde acogen a mujeres con discapacidad intelectual, física y sensorial, y cuyo objetivo es darles una respuesta integral atendiendo las necesidades básicas, afectivas y sociales que merecen. Además, se preocupan por estimular las capacidades de todas ellas mediante una atención acorde con las facultades de cada una y conseguir así que sean autosuficientes y mantener su motivación».
La jornada para estos seis scouts comenzó participando en la Misa con estas mujeres. «Algunos tuvimos la suerte de ayudar al sacerdote durante la Eucaristía y ver los rostros felices de los residentes mirándonos con asombro e ilusión, pues nuestra visita parecía agradarles. Al finalizar la Misa, muchas de ellas se acercaron a saludar y pudimos hacernos unas cuantas fotos. Más tarde las acompañamos, o nos acompañaron ellas, a un salón amplio. Por el camino hablaban con nosotros, animadas por ver a un grupo de jóvenes uniformados. Algunas nos estrechaban la mano, nos preguntaban si éramos scouts y que si íbamos al campo y esas cosas. Les hablamos de nuestro grupo y de que estábamos allí para pasar el día con ellas. En el centro del salón había un par de mesas con bandejas de fruta y vasos, y fue cuando las voluntarias que allí estaban nos anunciaron que las ayudaríamos a hacer un batido. Y digo ayudar porque gran parte del trabajo lo hicieron las chicas. También fue un momento de interacción con ellas, creo recordar que pusieron música, y pasar un rato agradable para conocerlas. Una vez hecho el batido lo repartimos y, aunque no hubo para todas, la mayoría parecían muy contentas», recuerda el joven scout.
En 2023, la Fundación Astier comenzó las obras del proyecto ‘Villa Delta’, que tiene como objetivo ofrecer un nuevo hogar a 149 mujeres con discapacidad intelectual, para que su vida sea más autónoma e independiente.
Tras terminar el batido, los scouts fueron hacia la casa acompañados por las residentes. Uno de los jóvenes explica que «una de ellas me contó de camino que han estado haciendo una obra y que tienen ahora un piso a lo largo del edificio habilitado para ellas. Me lo contó muy ilusionada, unas diez veces me lo contó, y tenía ganas de verlo. Fuimos hasta un comedor, las voluntarias estaban preparándolo todo porque pronto sería la hora de comer. Entonces una de las voluntarias nos propuso subir al piso nuevo. Mientras íbamos, se acercó una de las residentes y vino directa a por mí. Me cogió la mano y comenzó la visita guiada. En un principio me agarró para yo poder ayudarla a subir las escaleras, pero una vez arriba no me soltaba por nada del mundo. Nos mostró una habitación amplia con cocina y sofás, todo muy limpio y nuevo. Luego continuamos por ver los dormitorios y los baños. Ella estaba tan ilusionada que me explicaba cada detalle; los armarios, las mesillas, las duchas, los lavabos… Hasta nos enseñaba las lámparas y los enchufes (en los que le gustaba meter los dedos por más que le advirtiéramos de que no lo hiciera). La casa me encantó y no me extraña que estuvieran tan contentas».
Este encuentro finalizó con una gran satisfacción para estos ‘rovers’ del grupo scout de Alcalá de Henares, quienes una vez fuera del Patronato San José tuvieron tiempo para reflexionar en conjunto y exponer su experiencia. «Personalmente vi que el ambiente es el de una familia muy grande, en la que viven en comunidad y no existen las preocupaciones. Me alegró verlas tan felices y tan a gusto con su vida, y ver como nos pedían que volviéramos algún día. Estoy seguro de que para ellas nuestra visita fue un regalo, pero más regalo fue para nosotros poder servirlas y vivir esa felicidad que contagian. Un servicio que, aunque podríamos haberlo aprovechado mejor, fue muy fructífero y sería bueno repetirlo algún día», concluye el joven.
Atendiendo a mujeres en Alcalá de Henares desde la década de los 70
La Fundación fue creada en 1892 por por Dña. Sofía Astier y Balboa, mujer sensible, comprometida y de gran corazón que al contemplar las desigualdades sociales de la época, le duele la situación de pobreza del país y la escasa atención que reciben las personas en situación de mayor vulnerabilidad. Posteriormente, en 1913, se hace cargo de la misión la Congregación Hermanas Mercedarias de la Caridad, por deseo de la propia fundadora.
A principios de los años 70 del siglo XX, la presidenta del Patronato orienta y apoya a las Hermanas Mercedarias de la Caridad para conseguir el actual Centro de Alcalá de Henares, en el que se atienden de por vida a mujeres mayores de 18 años con minusvalías psíquicas.